Estados Unidos mató a Qassem Soleimani, un poderoso jefe militar de Irán. Hay preocupación mundial por una escalada de violencia.
Qassem Soleimani, jefe de la Guardia Revolucionaria Islámica y comandante de las Fuerzas Al Quds, murió este jueves en un operativo de Estados Unidos en las inmediaciones del aeropuerto de Bagdad, la capital de Irak.
Soleimani, de 62 años, era el hombre más poderoso dentro de la estructura militar iraní y controlaba a las milicias iraníes en todo Medio Oriente. En el bombardeo también murieron nueve de sus colaboradores.
Poco después de su muerte, el Pentágono anunció que el presidente estadounidense, Donald Trump, dio la orden de “matar” a Soleimani. Asimismo informó que el operativo buscaba disuadir futuros planes de Irán. “Soleimani estaba desarrollando activamente planes para atacar a los diplomáticos y miembros del servicio estadounidenses en Irak y en toda la región”, señaló en un comunicado.
Por otra parte, el presidente iraní, Hasan Rohani, prometió venganza: “No hay ninguna duda de que la gran nación de Irán y otras naciones libres de la región se vengarán por este horrible crimen del criminal Estados Unidos”.
Potencias mundiales como China, Rusia y Francia manifestaron su preocupación por una escalada de violencia extrema. “Nos despertamos en un mundo más peligroso”, remarcó la viceministra de Exteriores de Francia, Amelie de Montchalin. En tanto, Rusia calificó el ataque estadounidense como “plagado de graves consecuencias”.