El primer ministro de Etiopía fue premiado por haber sido el artífice de la reconciliación entre su país y Eritrea.
El primer ministro etíope, Abiy Ahmed Ali, es el ganador del premio Nobel de la Paz 2019 por sus esfuerzos para alcanzar la paz y la cooperación internacional y, en particular, por su decisiva iniciativa para resolver el conflicto con la vecina Eritrea.
El político africano, que llegó al poder en Etiopía en abril del año pasado, fue destacado por haber promovido la reconciliación, la solidaridad y la justicia social. Además del reconocimiento a nivel mundial, el premio consta de una medalla de oro y una dotación de 9 millones de coronas suecas (alrededor de US$900.000).
La presidencia de Etiopía expresó su orgullo y publicó un comunicado en su cuenta oficial de Twitter: “Desde que el primer ministro Abiy Ahmed asumió el liderazgo político en abril de 2018, ha hecho de la paz, el perdón y la reconciliación componentes clave de la política de su administración. A nivel nacional, logró la liberación de decenas de miles de prisioneros políticos, otorgó amnistía a entidades de medios y partidos políticos acusados bajo la ley antiterrorista para que regresen del exilio y se comprometan pacíficamente; amplió el espacio para los partidos políticos; facilitó la reconciliación entre grupos rivales y creó la comisión de paz y reconciliación”.