Tras el temblor de magnitud 6,4 del jueves, el sur de California sufrió un sismo de mayor dimensión. Es el más grande de la región en 20 años.
El Servicio Geológico de Estados Unidos informó que el viernes a las 20.19 (sábado a las 0.19 hora de Argentina) otro terremoto sacudió el sur de California. El jueves había sido uno de magnitud 6,4 y esta vez fue aún de mayor dimensión, de magnitud 7,1 en la escala de Richter.
Es el sismo más fuerte que se haya registrado en la región en dos décadas y se inició en el mismo lugar que el que se produjo el jueves, en Searles Valley, cerca de la localidad de Ridgecrest. Se trata de una región con escasa población en el desierto de Mojave, a unos 200 kilómetros al noreste de Los Ángeles.
Funcionarios dijeron que aún no se sabía el alcance de los daños ni cuántas personas habían resultado heridas, pero sí se han registrado incendios y cortes de energía. Hay al menos 1.800 personas sin luz, casas movidas, grietas en los cimientos, muros caídos y numerosos escapes de gas según trascendió desde los medios locales.