Un atentado suicida reivindicado por ISIS dejó al menos 63 muertos y 182 heridos el sábado por la noche en una fiesta matrimonial en Kabul.
Lo que era una fiesta terminó en una tragedia. Un casamiento en Kabul, la capital de Afganistán, fue el objetivo de un atentado suicida que dejó al menos 63 muertos y 182 heridos. El ataque se lo adjudicó el Estado Islámico (ISIS).
Poco antes de las 23, un kamikaze hizo detonar explosivos dentro del salón donde decenas de invitados bailaban y festejaban según declaró uno de los sobrevivientes. “Convirtieron mi felicidad en desgracia”, comentó Mirwais, el hombre que contrajo matrimonio el sábado.
El Estado Islámico, islamistas radicales sunitas, atacaron en numerosas ocasiones a la comunidad chiita de Afganistán, de la que formaba parte las familias de los novios. El atentado se da en un momento en el que Estados Unidos y los talibanes negocian un acuerdo, lo que ha multiplicado la violencia en el país.